Amo «Dirt«. Tal vez el mejor disco grunge de todos los tiempos. Lo malo es que se lanzó en 1992, el año del éxito de Nirvana y Pearl Jam, y quedó relegado por «Nevermind» y «Ten» en el trío de los mejores álbumes del rock de principios de los 90.
Alice in Chains fueron grandes. Ídolos de la llamada generación X junto con los Pearl Jam, Soundgarden, Mudhoney y Nirvana, en el año 93 ya habían vendido más de 3 millones de copias sólo en los Estados Unidos (en total más de 12 millones). Layne Staley competía duramente con Kurt Cobain y Mark Lanegan por ser el más desarraigado y drogadicto de los músicos de Seattle.
La fama llegó con “Solteros” (Singles). Cameron Crowe dirigió con brillo a Matt Dillon y Bridget Fonda en una entretenida película que cuenta las andanzas de 6 vecinos veinteañeros que viven en Seattle, y cuya banda sonora son esos primeros Pearl Jam (Mother Love Bone), Screaming Trees y por supuesto Alice in Chains.
El directo de los Cantrell, Staley y compañía (empieza en el minuto 1:29), junto con el cameo de Chris Cornell hacen de esta película algo diferente y con cierto gusto de leyenda para una generación.
Poco después de “Solteros” y de “Dirt”, Layne Staley se enganchó seriamente a la heroína y entonces se jodió todo. “Jar of Flies” era un buen disco, el del perro en la portada te dejaba con ganas de mucho más, y el unplugged de la MTV era un directo sin energía.
Staley murió en 2002. Cantrell siguió con la banda, pero nunca volvieron a ser igual de grandes.
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